Pensemos en el sistema como un gran repositorio para los usuarios, permitiendo almacenar, acceder y registrar información en un solo lugar. Cualquier usuario provisto de identificación y contraseña podrá ingresar a los recursos didácticos del sistema.
Diseño responsivo: Los usuarios podrán acceder al sistema desde cualquier dispositivo que elijan, ya sea computadora de escritorio, teléfono inteligente, tableta o laptop. El LXS desplegará automáticamente la versión más adecuada para cada uno de los dispositivos. Adicionalmente, los usuarios podrán descargar contenido para trabajar fuera de línea.
Interfaz amigable: La interfaz del usuario permitirá a los estudiantes navegar fácilmente por la plataforma LXS y mantendrá alineados los objetivos y habilidades, tanto del usuario como de la organización.
Reportes y analíticas: Debe integrar herramientas de evaluación. Los instructores y administradores deben de contar con la capacidad para visualizar y revisar sus iniciativas didácticas para determinar su efectividad y realizar ajustes en caso de que sea necesario.
Manejo de cursos y catálogos: Debe contener todos los cursos de e-learning disponibles y accesibles para que administradores e instructores puedan manejar el catálogo y dirigirlo hacia una experiencia de aprendizaje enfocada a resultados.
Contenido inter operable e integrado: El contenido creado y almacenado en un LXS debe empaquetarse de acuerdo a estándares educativos regulados por instituciones calificadas.
Servicio de soporte: Los diferentes desarrolladores deben ofrecen distintos niveles de soporte, como foros de discusión, donde los usuarios puedan interactuar entre ellos, chats y números telefónicos de ayuda.
Inteligencia artificial: Puede contribuir a generar experiencias personalizadas de aprendizaje para los usuarios, a través de formatos adecuados a sus necesidades o sugerir cursos que puedan resultar interesantes de acuerdo a los anteriores que han tomado.
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